Esta es la historia
de una niña que no creía en el amor y mientras veía como sus amigas se
enamoraban y jugaban en las relaciones ella leía y leía libros interesada en
todo lo que le rodeaba y satisfacía su curiosidad, una tarde decidió entrar en
una red social motivada por el intelecto que en ella había, descubrió que podía
ser ella misma sin el tabú de las razas ni religión, su mejor amiga pasaba de
estas cosas y siempre le decía que conociera algún chico y experimentara pero
ella tenía muy claro una cosa no se entregaría gratuitamente a cualquiera, ella
esperaba a un hombre que le diera sentido a todas sus preguntas y sabía que ese
hombre no sería de su misma edad sino mayor que ella, ese secreto no solía
contarlo ya que nadie entendería sus preferencias, una tarde de las que estaba
encerrada no tenías ganas de leer y decidió entrar en la red social, empezó
observando como siempre hacia, esperando el momento idóneo para intervenir,
entonces un tuit la llamo la atención, era de un tal humanoide, replicó su tuit
y sorprendida por las respuestas ella siguió jugando a la vez que interesada
por su forma de pensar, entraron en un juego de respuestas y preguntas y cuando
parecía que todo iba acabar él le respondió, que el destino decida sino
volvemos a ver....ella sonriendo decidió darle la oportunidad de conocerse más
allá de la red social, a la mañana siguiente ella contaba a su amiga lo
sucedido y su amiga le advirtió que tuviera cuidado, cada vez que ella hablaba
con él una explosión de sentimientos inundaban su cuerpo, una tarde ella le
pregunto a el que cual era su edad y descubrió que la doblaba en edad, a ella
no le importo solo quería seguir conociendo a ese hombre tan misterioso que
tanto le gustaba. Una noche ella estaba en la cama y pensando en su vida y que
le repararía el futuro se hizo una promesa, algún día me iré sin mirar atrás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario